Si bien la práctica de Mindfulness es conocida principalmente como una práctica de meditación, hay algunas prácticas de Mindfulness conocidas como prácticas informales que la complementan. Estas actividades nos permiten cultivar un mayor grado de presencia y alegría en nuestra vida cotidiana.
Mindfulness nos invita a llevar nuestra atención al momento presente, evitando que la mente se pierda en sus pensamientos. Al dirigir nuestra atención a lo que está sucediendo momento a momento, sin juicio aprendemos a aceptar lo que es y nos abrimos a nuevas posibilidades. Esto nos permite disfrutar más de los pequeños momentos cotidianos, de conectarnos con nosotros mismos y con los seres que amamos y reduce significativamente nuestros niveles de estrés y ansiedad entre otras cosas.
En este artículo vamos a explorar 5 prácticas de Mindfulness que van más allá de la Meditación. Estas son una invitación a regresar al momento presente y te permiten conectarte con lo que está sucediendo adentro de ti momento a momento.
1. RESPIRACIÓN CONSCIENTE
Haz una pausa de vez en cuando durante tu día y simplemente observa el flujo natural de tu respiración. Sin cambiarlo o modificarlo, permite que sea tal cual es. Independientemente que te sientas agitada/o, ansiosa/o, triste o contenta/o, emocionada/o o feliz, observa sin juicio. La intención es utilizar tu respiración como un ancla para mantenerte presente y ponerte en contacto con cómo te sientes. La práctica de Mindfulness nos invita aquí a no cambiar o alejar lo que sientes. Simple observación y reconocimiento.
2. PRÁCTICA DE GRATITUD
Todos los días, cuando te levantes o antes de irte a dormir, piensa y/o escribe 3 cosas por las que te sientes agradecida/o. No importa si son cosas grandes o pequeñas, lo importante es el sentimiento de gratitud que experimentará tu corazón al hacer este ejercicio. No te preocupes si son las mismas 3 cosas día tras día: la parte más importante es cambiar tu enfoque y de consecuencia tus patrones mentales de lo que no tienes a lo que tienes y amas.
3. CAMINAR EN LA NATURALEZA
Camina lentamente, sin prisa, preferiblemente sola/o y en silencio. Observa todo lo que te rodea: colores, olores, sonidos, sensaciones en tu piel y observa cómo te sientes por dentro. Observa tu respiración y tus pensamientos sin perderte en ellos. Permíteles fluir como olas en el océano, sin querer detenerlos o seguirlos. Permítete estar presente y recibir el regalo de la vida momento a momento.
4. ESCRIBIR
Ten un diario dedicado donde poner tus pensamientos en papel. Tómate 5 o 10 minutos para escribir cómo te sientes y todo lo que pasa por tu mente. Deja de lado tus juicios, no te preocupes si estás considerando “racionalmente” lo que escribes como bueno o malo, correcto o no. Simplemente deja que tu mente se vacíe. No pienses en qué escribir a continuación, el punto es continuar sin detenerse, incluso si eso significa componer oraciones “sin sentido”.
Este ejercicio te dará mucha claridad mental.
5. EXPRESIONES CREATIVAS:
Por lo menos una vez a la semana, dedica un tiempo para expresar tu ser creativo. Puede ser dibujando, coloreando, cantando, bailando, cocinando, tocando un instrumento, escribiendo o cualquier otra forma creativa que te guste o te interese. Esto va más allá del concepto de “arte” al que estamos acostumbrados: se trata de expresar quiénes somos independientemente del resultado.
La creatividad nos permite expresar nuestros sentimientos más profundos y nos da una sensación de libertad y claridad.
Estas prácticas, aunque simples, son profundamente transformadoras. El secreto, como siempre, es practicar constantemente y darnos el permiso de pasar tiempo con nosotros mismos para volver a conectarnos con quienes realmente somos.
Si quieres comenzar a explorar tu creatividad utilizando las herramientas de Mindfulness te invito a participar en mi curso en línea “Aprende a Dibujar Mandalas como instrumento de Mindfulness”. Aprenderás a crear tu propio Mandala desde cero, los principios básicos de la práctica de Mindfulness y cómo integrar esta práctica al proceso creativo. Así como cultivar el hábito de la meditación desde una perspectiva diferente y complementaria.
El curso está abierto a todos y no se requiere experiencia previa en ninguna práctica de arte visual o meditación.