Hablar de alineación en Yin yoga es una invitación a observar cómo nuestro cuerpo se siente en cada postura, en vez de preocuparnos sobre cómo la postura se ve. Esto nos lleva a ir más allá de la idea de tener una alineación “correcta” o “incorrecta” y a soltar la idea de que si lo estamos “haciendo bien o no”. Por lo que el Yin yoga, dirige más bien nuestra atención hacia la sensación que estamos probando en nuestro cuerpo.
Cuando hablamos de alineación en Yin yoga son importantes 2 factores: el área de enfoque y la intensidad de la sensación que estamos probando.
El área de enfoque
Como maestros o practicantes de Yin yoga, tenemos que tener claro cuál es el área de enfoque de la pose que estamos utilizando y cuál es nuestra intención en proponer esa determinada postura.
Si por ejemplo mi intención es acceder al meridiano del estómago, puedo escoger la pose de montura para probar la sensación en mis cuádriceps. Esta es mi área de enfoque.
Si por algún motivo alguno de mis estudiantes no tiene acceso a esta pose, ya sea por alguna molestia en las rodillas, por la estructura anatómica de su cuerpo o cualquier otra razón, puedo ofrecerle otras poses o variaciones de la misma para que pueda probar la sensación en la misma área de enfoque. En tal caso, le puedo ofrecer por ejemplo las variaciones de las 2 poses que ves en las fotos aquí abajo, en donde el área de enfoque sigue siendo la misma.
Recuerda que la práctica de Yoga es accesible a todos, sin importar el grado de flexibilidad o movilidad de una persona. Por lo que sí tenemos claro cuál es el área de enfoque, es responsabilidad de cada maestro de yoga (Yin o Yang) encontrar la postura adecuada al arquetipo de la persona que tenemos enfrente. Y no viceversa.
La intensidad de la sensación
El segundo elemento importante cuando hablamos de alineación en Yin yoga es la intensidad de la sensación. En Yin yoga queremos probar una sensación en el área de enfoque y esta sensación no tiene que ser ni muy intensa ni muy sutil. Podríamos definirla como una sensación interesante pero no abrumadora, la cual podamos sostener en quietud entre 3 y 6 minutos manteniendo nuestra respiración fluida. En una escala de 0 a 10 en donde 0 es no siento ninguna sensación y 10 es la sensación es muy intensa, queremos mantenerla en un 6 o 7.
Nunca queremos sentir dolor en la práctica de Yin, por lo que sí la sensación es muy intensa y la puedes señalar con tu dedo, es una indicación de que tienes que modificar la postura. Ya sea utilizando los accesorios de Yoga (cobijas, bloques, bolster, etc) o utilizando una variación distinta de la postura.
Una de las intenciones de la práctica de Yin yoga es ponernos en contacto con nuestro cuerpo y cuando tenemos clara cual es el área de enfoque y la intensidad de la sensación, esto nos permite suavizar nuestra práctica para ir encontrando a nuestro cuerpo con respeto y amor, en vez de forzarlo a posturas que no son accesibles en un determinado momento y lastimarlo o lesionarlo.
Es una invitación a cambiar tu enfoque de “¿lo estoy haciendo bien? O ¿cómo me veo en la postura?” A cómo me siento en la postura. Con las palabras de Bernie Clark: “No usamos el cuerpo para acceder a una postura, usamos las posturas para acceder a nuestro cuerpo.”
Así que si sientes la sensación en el área de enfoque y la intensidad es de un 5-6 estás haciendo la postura de forma “correcta”, independientemente de cómo se vea y de que cada estudiante en tu clase esté en una variación distinta. La mejor alineación en Yin yoga es la que se siente bien adentro de ti.
Si quieres profundizar en esta maravillosa práctica, revisa las fechas de la próxima Certificación de Yin yoga & Mindfulness.